El artículo pide una solución de dos Estados como «la única opción creíble para garantizar la paz y la seguridad para todos y asegurar que ni los israelíes ni los palestinos tengan que revivir los horrores que les sobrevinieron» tras el ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre, cuando los extremistas mató brutalmente a 1.200 israelíes y tomó como rehenes a cientos.
Los tres líderes también advirtieron sobre «consecuencias peligrosas» si Israel sigue adelante con su planeada ofensiva en Rafah, la ciudad del sur de Gaza donde más de un millón de palestinos se refugian de los bombardeos israelíes.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha prometido en repetidas ocasiones asaltar la ciudad, alegando que es el último bastión de Hamás, y dijo el lunes que «hay una fecha» para la ofensiva, que no reveló. El aliado clave de Israel, Estados Unidos, instó a Israel a reconsiderar su decisión.
Los nuevos llamamientos a un alto el fuego se producen después de que la última ronda de conversaciones entre Israel y Hamás en El Cairo se estancara el lunes. Un funcionario de Hamás dijo a Reuters que la propuesta de paz israelí no contenía «nada nuevo».
