La inversión inmobiliaria centrada en la conservación está ocupando un lugar central en el sur de Chile. La región de Los Lagos es una de las áreas que se encuentran protegidas a través de proyectos como Refugio Nativo y Mirador del Lago, ambos ubicados en sectores boscosos de gran valor natural.
Una de las empresas involucradas en este tipo de iniciativas es Genau Green, a través de iniciativas que combinan protección ambiental y rentabilidad, permitiendo el cuidado de los ecosistemas naturales de la tierra.
Hasta la fecha, hay más de 20.000 hectáreas protegidas y esperan llegar a 100.000 en 2030. Con un modelo de desarrollo que pone en el centro la protección del territorio y sus recursos naturales, intentan tener cuidado con la intervención. De esta manera, generan planes que agregan valor a los territorios donde se ubican, evitando el desarrollo de otras propuestas comerciales e industriales que puedan destruir estos lugares.
Camilo González, Gerente de Operaciones de Genau Green, indicó que apuntan a «cambiar el paradigma en cuanto a la relación que hoy tenemos con la naturaleza, a través de iniciativas colectivas que involucren a las personas en el desafío de proteger los bosques locales en Chile y en el apoyo a actividades como como reforestación, gestión sostenible e inversión en tierras de alto valor ecosistémico».
En definitiva, amplían la participación de personas e inversores en el desafío de proteger el planeta. Para ello, se centran en propiedades que tienen necesidades ambientales específicas o que están amenazadas por diversas prácticas e industrias. En esos lugares, sin embargo, ofrecen planes centrados en la conservación.
La idea surgió luego de varios años de análisis de los principales desafíos ambientales que enfrenta el planeta y Chile en particular. Según este análisis, explicó González, una de las acciones de mayor impacto para contrarrestar la crisis climática es el cuidado del suelo y los bosques, generando una nueva relación entre las personas y la naturaleza.
«Estamos haciendo esto porque existe una necesidad urgente de valorar y proteger la naturaleza. Entender que sin nuevos modelos de actitud hacia ella no tenemos futuro posible. En el caso específico de la tierra y sus bosques, cada territorio requiere ciertas cosas a las que les prestamos atención y generamos un programa que busca solucionarlas”, puntualizó.
Sobre cómo aseguran que sus propuestas realmente busquen beneficiar a los territorios donde se desarrollan, el ejecutivo comentó que “de varias maneras, principalmente conociendo el lugar y sus capacidades, virtudes y requerimientos. Este nivel de formación nos permite ofrecer conocimientos y partimos de la base de que con nuestra implicación estamos haciendo el bien a los bosques y a los suelos”.
Sumado a lo anterior, todos los proyectos de la compañía cuentan con DRC (Royal Conservation Rights), un derecho ambiental directo sobre la propiedad que permite o no ciertas actividades en la propiedad, protegiendo así su patrimonio natural. Al mismo tiempo, cuentan con recomendaciones de usos específicos para cada espacio según la geografía del lugar, el contexto natural y otras características derivadas del levantamiento territorial.
“Nuestro público objetivo es cualquier persona que quiera participar en el desafío de la sostenibilidad y la protección de los ecosistemas en Chile. También son aquellas personas que buscan invertir en instrumentos de alto rendimiento, pero con un fuerte enfoque ambiental”, concluyó el directivo.